Dr. Manuel Luis Martí

La Pascua de Resurrección es la máxima celebración del cristianismo ya que conmemora el hecho fundamental de la vida de Jesús que es el volver de la muerte para dar la salvación a la humanidad,

Nuestra existencia es trascendente a partir de ese momento en el que se nos promete la vida eterna y se nos señala el camino para lograrla.

Los cuarenta días que la preceden existen para prepararnos para este acontecimiento mediante la tradición dada por la autorreflexión, la oración, el ayuno y la limosna y llegar de la mejor forma posible a la vida del tiempo pascual.

Para el médico la Cuaresma constituye un tiempo especial que favorecerá la recordación de sus deberes como cristiano que ejerce una de las profesiones de mayor magnitud humana.

Estamos en un tiempo de reconciliación y renacimiento, un tiempo de posibilidad de autoconocimiento profundo para reafirmar nuestra vocación de solidaridad con el que sufre y al que podemos auxiliar a través del amor y nuestros conocimientos.

Los cuarenta días son los que emplearon Moisés, Elías y Jesús para permanecer en el desierto y confirmar el derrotero de sus vidas.

El desierto significa la soledad absoluta que nos permite profundizar en la sabiduría y conocer nuestras virtudes y nuestros defectos y, como resultado, tener una nueva visión del camino que se abre desde la reconciliación. Estos cuarenta días son nuestro desierto espiritual que nos prepara para le fiesta.

Las virtudes teologales de la Fe, la Esperanza y el Amor, este último en el sentido de la caritas de San Pablo, pueden ser la guía para refundar nuestras creencias, nuestros sentimientos y nuestro deseo de un futuro de paz.

En un mundo pleno de violencia y de olvido de lo bueno, la Cuaresma es un hito dinámico que nos orienta hacia la salvación y nos permite la espera de la vida futura por medio de la Resucitación Pascual.

Es una época de espera para el retorno de una vida nueva.

El Médico ha nacido para el bien y para luchar contra el mal :El bien es la vida.

Dr. Manuel Luis Martí

Pascua de Resurrección 2024